Más específicamente, se entiende por carga:
- Las actividades físicas y/o mentales que realiza el deportista encaminadas al desarrollo de las capacidades, hábitos, etcétera.
- La suma de los efectos del entrenamiento sobre el organismo.
Las cargas tienen dos manifestaciones:
Intensidad: Es el grado de concentración y dificultad de un ejercicio en la unidad de tiempo.
La densidad de la carga de entrenamiento es la relación entre el trabajo (la actividad efectiva) y el descanso.
La frecuencia de la carga es el número de veces que se aplica el estímulo motor dentro de la sesión de entrenamiento (frecuencia intrasesión) o en un microciclo (frecuencia intersesión). La carga de entrenamiento es la verdadera base de la adaptación y del consiguiente aumento del rendimiento. Para la dosificación de la carga, tres leyes biológicas son obligatorias:
- Un estímulo que esté por debajo del umbral no produce adaptación.
- Un estímulo demasiado alto produce sobreentrenamiento.
- Las adaptaciones específicas necesitan cargas específicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario